El sábado 10 de julio de 2017 para muchos fue un típico día soleado de otoño. Para el doctor Pecas Soriano fue su decimotercer día de huelga de hambre frente a la sede de Apross.
El médico y poeta cordobés reclama que la entidad provincial le reintegre ochenta mil pesos de los ciento cincuenta mil que tuvo que pagar para recibir un tratamiento médico a raíz de una infección ocular, que derivo en la pérdida de su ojo derecho, y por añadidura , en la compra de una prótesis ocular. Al no obtener respuesta de las autoridades correspondientes, publicó una carta abierta al contador Raúl Gigena, de la mencionada entidad de seguro de salud.
Relata Pecas Soriano: “Y en vez de recibir una respuesta, recibo cientos y cientos de cartas de afiliados que pasaban situaciones similares. Llamados y mensajes comentando de todas las vicisitudes que tenían los afiliados de esta cobertura de salud.”
Fue entonces que supo que el problema no era solamente suyo sino mucho más grave. A raíz de esto decidió hacer público su reclamo, colocar una casilla frente a la sede de Apross e iniciar una huelga de hambre.
En la esquina de Achával Rodríguez y Cañada se ve el campamento de Pecas, poblado de carteles que apoyan su lucha y otros con reclamos hacia la entidad provincial. Cerca del mediodía nos acercamos a las instalaciones para compartir y acompañar un día de esta protesta con el doctor.
Nos saludamos con un abrazo y tomamos asiento en unas reposeras en la entrada de Apross, junto a un pizarrón que tiene escrito el número trece, la cantidad de días que lleva luchando.
Universidad Abierta: ¿Cómo fue el primer día en la huelga de hambre?
Pecas Soriano: El primer día me acompañaron varios legisladores y solicitamos una reunión con el presidente de Apross; nos dieron una repuesta negativa .Y después me clavaron un puñal en la espalda calumniándome, diciendo que yo había presentado facturas falsas sobre el tratamiento. Eso fue desmentido al día siguiente por la prensa. Desde entonces hasta ahora estamos esperando una respuesta satisfactoria.
El miércoles pasado recibió un NO definitivo de Apross a su pedido de reconsideración, a su reintegro económico. Ahora el conflicto ha pasado a manos del Poder Ejecutivo, que deberá expedir una respuesta.
Mientras conversamos, personas se acercan para dar su apoyo al doctor, se sacan fotos y se quedan aunque sea unos minutos para conversar sobre el conflicto. Muchos llevan mates y se forma una comunidad muy solidaria. Uno de los pocos lugares en Córdoba con tanto calor humano.
UA: Hace casi dos semanas que está instalado frente a al edificio de Apross ¿Qué ha visto que le haya causado mayor impresión?
PS: En todo este tiempo lo que vi es cientos y cientos de afiliados que salen con graves problemas, porque esto que parece ser una obra social no lo es. Realmente es una administradora. Apross significa administradora provincial de seguros de salud. Entonces cuando vienen diabéticos, personas con discapacidades o afiliados que necesitan medicamentos oncológicos, cuestiones que deben ser cubiertas al 100 % , de acuerdo a la ley de obras sociales, la entidad provincial se ataja diciendo que no son obra social y no dan respuestas a estos reclamos.
UA: ¿Y qué hacen las personas en estos casos? Es decir cuando no obtienen respuestas a sus problemas.
PS: Algunos presentan recursos de amparos, otros no tienen dinero para presentar estos recursos y muchos se mueren en el camino. Esto es una muerte silenciosa y encubierta, en desconocimiento total de los ciudadanos de Córdoba, porque no se hace público. Era necesario visibilizar la situación como se está haciendo ahora.
UA: Además de las carencias en la cobertura de la salud de la administradora provincial ¿Qué más es necesario difundir sobre esta situación?
PS: Qué Apross es una caja recaudadora para el gobierno de turno. De solidaria, eficiente, equitativa y democrática no tiene nada. Acá designa el directorio el gobierno de turno, hay un representante del SEP (Sindicato de Empleados Públicos) que está como pintando y entre dos o tres personas deciden la salud de la población.
Me causa admiración ver a Pecas conversar con todos los que se acercan a saludarlo, sabiendo que lleva 13 días sin consumir alimentos sólidos y todavía tiene energía para contar su lucha, una lucha que debería ser tomada como propia por todos los afiliados de Apross.
A la tarde un grupo de personas toma mates y discuten sobre política, salud, sociedad, diversos temas y diversas voces. Una representante de UTS (Unión de Trabajadores de la Salud) toma un megáfono y comienza a contar el reclamo del médico-poeta. Los autos pasan y tocan bocina en señal de apoyo a la causa, los peatones se detienen para conocer la situación, y Pecas saluda, conversa, reclama.
UA: ¿Hasta cuando piensa seguir con la huelga de hambre, Pecas?
PS: Y vamos a seguir acá hasta que obtengamos una respuesta. Cada día se suma más gente, yo no hubiera podido solo. Por acá pasó Sonia torres, un montón de artistas, legisladores, poetas, pacientes, ciudadanos que desconocían el tema y llegaron para solidarizarse. Tenemos muchas muestras de apoyo, se dan cuenta que nuestro reclamo es justo, por lo tanto consideran que el gobierno debe dar una respuesta,… ya no el directorio de Apross.
UA: No puedo evitar pensar en su salud con tantos días de huelga encima…
PS: Saludable no es, pero menos saludable es que se siga muriendo gente. El interés colectivo está por sobre el interés individual. Seguiremos hasta que el cuerpo aguante.
El sol se va del todo. Comienza a sentirse el frío otoñal. Decenas de personas se encuentran en ronda frente a las escaleras de la sede de Apross, cantan canciones de lucha contra las injusticias. El doctor Pecas Soriano se encuentra en el medio de la ronda, sentado, el día ha sido largo, el amor y el apoyo que pude apreciar de las personas hacia el doctor no cabe en palabras. Lo veía ahí en medio de ese abrazo gigante y solo podía pensar en un fragmento de un poema de Mario Benedetti “y la victoria crecerá despacio, como siempre han crecido las victorias”.
Por Emi Urouro
PH Micaela Maidana
